¿Vergüenza de qué? (La 31a. del Popular)

La delincuencia se va apoderando de los estadios

Sin jugar el Popular obtuvo la 31 

Extraída de Google: AlAireLibre.cl

No me avergüenzo de lo ocurrido en el Estadio ‘Elías Figueroa’. Me indigno, lisa y llanamente.

Me indigno porque los delincuentes se adueñaron definitivamente del fútbol.

Me indigno porque Carabineros está amarrado de manos y no puede dar una buena pateadura a estos criminales.

Me indigno porque hay gente que ve la violencia emergiendo de una camiseta, en lugar de entender que no tiene afición.

Me indigno porque hay aprendices de sociólogos que intentan ver bajo el agua y aluden esta violencia a circunstancias históricas.

Me indigno porque el equipo del Popular cantaba en el camarín ‘Chuncho conche…’ (mientras entrevistaban a Gonzalo Fierro en ADN Radio Chile), olvidando lo ocurrido en la cancha.

Me indigno porque Esteban Paredes habla de haber perdido la batalla (el miércoles contra la ‘U’) y haber ganado la guerra (un partido que no se jugó por los violentos incidentes).

Me indigno porque el presidente del club declara muerto de la risa que le pasen la copa para celebrar.

Me indigno porque detienen a un ‘pastel’, mientras los cientos restantes arrancan armados hasta los dientes y con el producto de su pillaje sin que les hagan nada.

Me indigno con quienes les dan dinero a los ‘hinchas’ que se ponen con una bandera en el suelo pidiendo para la entrada.

Me indigno con José Roa, jefe de Estadio Seguro (¡plop!) por su ineficiencia.

Me indigno, finalmente, con quienes piden sanciones contra el Popular por lo ocurrido. Lo deportivo no tiene que ver con lo criminal. Es como castigar a un colegio por el delito de un Profesor o un alumno. Es como castigar a la Iglesia por los delitos de Karadima. Es como castigar a Chile por los delitos de Jadue.

¿Celebro la 31ª.? Todavía no, no tengo ganas, la verdad.