¡Nunca diga Causiño!

Actualizado el 7/6/2021

La tenía reservada desde hace tiempo, lo confieso.

DUOC UC (y lo escribo como sigla, aunque puede ser como acrónimo, es decir, Duoc UC) tiene entre sus sedes más hermosas - por lo menos, en la V Región – a Cousiño.

Edificio patrimonial, estuvo abandonado muchos años. Fue conocido en sus peores momentos como ‘La Ratonera’: derruido, guarida de roedores y dormitorio de indigentes, fue escenario de numerosas muertes producto de las fogatas que allí se hacían en las heladas noches porteñas. De estas provienen los numerosos relatos de aparecidos, fantasmas y otros fenómenos inexplicables.

DUOC se adjudicó su restauración hace algunos años; invirtió recursos para devolverle al Puerto – intersecciones de Avda. Errázuriz y Blanco, a metros de la costa – una edificación histórica.

Hoy luce maravilloso, un palacio que me recuerda los mejores hoteles brasileños: su aroma a limpio, el orden, iluminación y fachada, su centro cultural y gastronómico, hacen que los alumnos de Turismo señalen orgullosos que es su sede. Y ningún paseante puede evitar una mirada de admiración al albo edificio.

Sin embargo, muchos incurren en un error cuando pronuncian su nombre: dicen ‘Causiño’.

En realidad, se debe decir ‘Cousiño’

¿Quiere verificarlo?

Vaya al buscador de Google, escriba ‘pronunciación de Cousiño’ y escuche en los dos idiomas: español e inglés.

Confirmará lo que digo.

Por ello, nunca diga ‘Causiño’. Siempre será ‘Cousiño’.